México. – Las compañías BASF y Yara International ASA anunciaron la suspensión conjunta del desarrollo de su proyecto para construir una planta de producción de amoníaco con bajas emisiones de carbono y tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CCS) en la región de la costa del Golfo de México, Estados Unidos.

La decisión fue tomada tras una revisión estratégica por parte de ambas empresas, que buscan priorizar iniciativas con mayor potencial para generar valor sostenible y cumplir con sus respectivas metas corporativas a largo plazo.

A pesar de la cancelación de este proyecto específico, Yara reafirmó su compromiso con el desarrollo de soluciones de amoníaco de bajo carbono, evaluando nuevas oportunidades de inversión en Estados Unidos para optimizar su cartera de proyectos en este rubro.

Ambas compañías mantendrán su colaboración activa. Actualmente, BASF y Yara operan de manera conjunta una planta de producción de amoníaco a escala mundial en Freeport, Texas, además de las operaciones que BASF mantiene en Ludwigshafen (Alemania) y Amberes (Bélgica).

Por su parte, Yara gestiona el sistema de amoníaco más grande del mundo, con instalaciones productivas distribuidas en Europa, América y Asia.

La decisión no afecta los proyectos y operaciones en curso, y ambas compañías continúan comprometidas con la innovación industrial y la transición energética responsable.