Nueva York. — El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con un fuerte repunte del 7.26 %, situándose en 72.98 dólares por barril. La subida se produce en un contexto de creciente tensión geopolítica, impulsada por una serie de ataques aéreos entre Israel e Irán que han elevado el temor a interrupciones en el suministro de crudo desde Oriente Medio.

Al término de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (NYMEX), los contratos de futuros del WTI para entrega en julio registraron un incremento de 4.94 dólares respecto al cierre anterior.

Según informes oficiales, la Guardia Revolucionaria de Irán lanzó hoy un ataque con misiles contra «decenas de objetivos, centros militares y bases aéreas del régimen sionista», en respuesta a los bombardeos previos realizados por fuerzas israelíes.

Este nuevo episodio de hostilidades marca una escalada significativa en el conflicto y genera incertidumbre sobre la estabilidad del flujo energético en una de las regiones más estratégicas para el mercado petrolero global.

Expertos del sector advierten que una posible interrupción en las exportaciones de petróleo desde el Golfo Pérsico podría ejercer una presión adicional sobre los precios del crudo, en un momento en que los mercados ya enfrentan tensiones por factores macroeconómicos y restricciones de producción en algunos países miembros de la OPEP+.

Las autoridades internacionales han llamado a la contención para evitar una mayor desestabilización en la región, mientras los inversores permanecen atentos a la evolución de los acontecimientos en Oriente Medio.