Washington D.C. – El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos registró una contracción del 0,3% anualizado durante el primer trimestre de 2025, marcando la primera caída económica en más de tres años, según datos oficiales publicados este miércoles.
La disminución del PIB, ajustado por inflación, ha sido atribuida en gran parte a un aumento significativo en las importaciones, impulsado por la carrera anticipada de las empresas estadounidenses por abastecerse de bienes extranjeros antes de la entrada en vigor de nuevos aranceles propuestos por la administración del expresidente Donald Trump.
El déficit comercial alcanzó niveles históricos, restando 4,8 puntos porcentuales al crecimiento económico trimestral.
A pesar de un aumento del 21,9% en la inversión empresarial, gran parte de ese crecimiento responde a compras adelantadas vinculadas a la incertidumbre comercial.
El consumo personal, uno de los principales motores de la economía, también mostró señales de debilidad, creciendo apenas un 1,8% frente al 3,7% del trimestre anterior, afectado por condiciones climáticas adversas y una menor actividad posnavideña.
A nivel macroeconómico, la inflación continúa siendo un factor de vigilancia, con el índice de precios del gasto en consumo personal (PCE) situándose en 3,6%, una cifra que mantiene a la Reserva Federal en estado de observación, aunque ha optado por mantener sin cambios las tasas de interés por el momento.
Economistas advierten sobre los posibles riesgos de una recesión si se intensifican las tensiones comerciales o si la debilidad del consumo se prolonga.