Madrid. – Un nuevo informe publicado esta semana por el reconocido científico Bjorn Lomborg, en colaboración con el Instituto Juan de Mariana, alerta sobre los riesgos económicos y sociales de financiar políticas climáticas sin una evaluación rigurosa de su impacto real.
El estudio sostiene que la actual obsesión por el cambio climático está derivando en una asignación ineficiente de recursos, con escasos beneficios ambientales pero fuertes consecuencias económicas.
Según Lomborg, esta estrategia está comprometiendo el crecimiento, dificultando la lucha contra la pobreza e incluso empobreciendo a la población más vulnerable.
“El coste de la acción climática desproporcionada no solo es financiero. Se traduce también en una mayor carga fiscal para los ciudadanos y en la reducción de fondos públicos destinados a servicios esenciales como la salud o la educación”, señala el informe.
Desde el Instituto Juan de Mariana se hace un llamado a repensar las políticas públicas sobre cambio climático bajo una lógica de eficiencia, proporcionalidad y coste-beneficio real, priorizando acciones que equilibren el cuidado ambiental con el desarrollo humano y económico sostenible.