Rotterdam, Países Bajos. — En el marco de la exposición TOC Europe, Konecranes dio a conocer dos de sus innovaciones más recientes en equipos portuarios sostenibles: la nueva grúa pórtico sobre neumáticos E-Hybrid (RTG) y el manipulador eléctrico de contenedores vacíos de 9-10 toneladas, reafirmando su ambicioso objetivo de ofrecer versiones completamente eléctricas de toda su cartera de productos para el año 2026.

“El nuevo RTG E-Hybrid amplía el concepto de energía híbrida más allá del funcionamiento tradicional diésel-batería, permitiendo operaciones con batería eléctrica como fuente primaria, con respaldo de conexión a red”, explicó Thomas Gylling, Director de Marketing y Experiencia del Cliente, Soluciones Portuarias de Konecranes.

“Esto es crucial para terminales que enfrentan riesgos de apagones, los cuales pueden detener completamente la operación portuaria incluso con cortes de apenas segundos”.

La RTG E-Hybrid de Konecranes puede cargarse mediante sistemas de carrete de cable o barras colectoras mientras continúa operando, con una demanda energética de solo 60 kW, muy inferior a los hasta 400 kW requeridos por otras RTG 100% conectadas. Esto permite ahorros significativos en infraestructura (CAPEX) para los operadores de terminales.

La solución ya se basa en componentes probados, incluyendo la tecnología de baterías actualmente en uso en más de 200 RTG híbridas de Konecranes a nivel global, lo que respalda su fiabilidad operativa.

Además, Konecranes anunció la expansión del manipulador eléctrico de contenedores vacíos en los mercados de Europa y Norteamérica, tras exitosos lanzamientos en Asia, Oriente Medio, África y Latinoamérica.

Esta carretilla, con capacidad de 9-10 toneladas, ha recibido elogios por su aceleración ágil, velocidad de elevación, baja vibración y ruido, así como por sus cero emisiones y carga rápida.

“Este modelo es la más reciente incorporación a nuestra línea de carretillas elevadoras eléctricas, que abarca rangos de 10 a 25 toneladas, y sigue demostrando que la eficiencia y la sostenibilidad no están reñidas”, añadió Gylling.