Bruselas. — En una operación coordinada por las autoridades de Italia, España y Bélgica, y con el respaldo de agencias de la Unión Europea, se ha logrado desmantelar una red criminal transnacional proveniente de Europa del Este, acusada del robo y contrabando sistemático de automóviles de alta gama.
Según informaron fuentes oficiales, los vehículos —en su mayoría autos de lujo robados en países de Europa Occidental— eran trasladados al Puerto de Amberes, Bélgica, donde eran camuflados y exportados ilegalmente hacia Dubái, con el objetivo de ser revendidos en el mercado local a precios muy por encima de su valor original.
La banda identificaba los vehículos en centros turísticos como Forte dei Marmi y Cortina en Italia, como también en Marbella en España.
Los automóviles eran equipados con dispositivos de rastreo, lo que permitía a los ladrones actuar posteriormente, de acuerdo a lo dado a conocer la policía italiana en un comunicado.
Los autos -principalmente modelos Range Rover, Lexus y Toyota– eran luego conducidos a Bélgica, donde se alteraban los números de chasis y se les colocaban matrículas falsas o clonadas, antes de ser enviados desde el recinto portuario de Amberes.
Los agentes incautaron cuatro vehículos robados, kits para clonar llaves, inhibidores de señal y otros equipos utilizados para abrir automóviles, desactivar sus sistemas de alarma y GPS, y desmontar los transpondedores de seguridad para evitar el rastreo posterior.
Eurojust y Europol, las agencias de cooperación judicial y policial de la Unión Europea, colaboraron en las investigaciones sobre el robo de más de 100 unidades de alta gama, con un valor total estimado de -al menos- 3 millones de euros, desde principios de 2024.
La redada conducida por las autoridades tuvo como objetivo a 24 sospechosos, en su mayoría provenientes de Moldavia, pero también de Rusia, Rumania y Ucrania; seis de ellos fueron detenidos y tres puestos bajo arresto domiciliario, según informaron los Carabinieri, quienes lideraron la investigación.