Hamburgo, Alemania. – Paolo Montrone, director global de Comercio Logístico Marítimo de Kuehne+Nagel, alertó que los principales puertos del norte de Europa están atravesando uno de los episodios de congestión más graves de los últimos años, una situación que, según los análisis de la compañía, podría prolongarse durante varios meses si no se adoptan medidas urgentes.
“Las causas fundamentales son múltiples y están interrelacionadas”, explicó Montrone. “Los buques están arribando fuera de sus franjas horarias asignadas, lo que genera acumulación en terminales ya saturadas. A esto se suma el malestar laboral, las huelgas y las recientes reorganizaciones entre las alianzas navieras, que han traído consigo una mayor incertidumbre operativa”.
Logística interior también colapsada
El directivo también señaló que la situación no se limita al frente marítimo. La infraestructura logística interior está bajo presión, especialmente debido al bajo nivel del río Rin, que ha restringido el transporte fluvial y redirigido gran parte del volumen hacia redes ferroviarias y carreteras ya al borde de su capacidad.
“Estamos frente a una crisis estructural que no puede resolverse con soluciones de corto plazo. Requiere una **redefinición estratégica del modelo logístico europeo”, subrayó Montrone.
Diversificación de corredores y replanteo del modelo “justo a tiempo”
Frente a este panorama, Kuehne+Nagel propone diversificar los corredores de transporte considerando puertos del sur de Europa, aun cuando representen costos operativos más elevados, así como el uso de rutas intermodales a través del Adriático y Europa del Este para aliviar la presión sobre las rutas tradicionales.
“Los enfoques ‘justo a tiempo’ deben ser reconsiderados para la carga crítica. Las compañías deben prepararse para plazos de entrega más largos. Cuanto más se demore la adaptación, más compleja será la recuperación. Es momento de actuar, antes de que la disrupción evolucione hacia una parálisis completa”, advirtió.


