Sao Paulo, Brasil. – Brasil está emergiendo como un competidor clave en el mercado global de tierras raras, desafiando la hegemonía de China en la producción y procesamiento de estos minerales críticos para tecnologías avanzadas. Con vastas reservas y proyectos estratégicos en marcha, el país sudamericano busca convertirse en una alternativa viable para reducir la dependencia global de China.

El Servicio Geológico de Estados Unidos estima que Brasil posee reservas de tierras raras que solo son superadas por las de China y Vietnam, con 44 millones de toneladas. Sin embargo, en 2023, la producción brasileña fue de apenas 80 toneladas, frente a las 240,000 toneladas de China .

Empresas brasileñas como Serra Verde Group están liderando la expansión en la producción de metales de tierras raras.

Con inversiones significativas y asociaciones internacionales, Serra Verde planea alcanzar una producción anual de 5,000 toneladas de óxido de tierras raras para 2026, enfocándose en elementos clave como neodimio, praseodimio, terbio y disprosio .

Además, el gobierno brasileño ha lanzado un fondo de 1,000 millones de reales (aproximadamente 194,5 millones de dólares) para financiar proyectos de minerales estratégicos, incluidas las tierras raras.

Este impulso busca construir una industria de transformación de estos minerales en aleaciones para baterías, turbinas eólicas y motores eléctricos, reduciendo la dependencia de proveedores asiáticos .

Sin embargo, el sector enfrenta desafíos, como la escasa financiación local. Proyectos como el Caldeira, ubicado en el estado de Minas Gerais, requieren inversiones significativas y han llevado a empresas como Meteoric Resources a buscar financiamiento internacional para avanzar en su desarrollo .

Con el respaldo de aliados estratégicos y una creciente inversión en infraestructura y tecnología, Brasil está posicionándose para desempeñar un papel crucial en la diversificación de las cadenas de suministro globales de tierras raras, ofreciendo una alternativa sólida a la dominancia china en este sector vital para el futuro tecnológico y energético mundial.