Pekín – El Gobierno de la República Popular China expresó su disposición a reanudar las negociaciones comerciales con Estados Unidos, aunque condicionó cualquier diálogo significativo a la retirada previa de los aranceles impuestos por Washington en el marco de la guerra comercial que ambos países mantienen desde 2018.
Funcionarios del Ministerio de Comercio chino señalaron que si bien existe interés en resolver las diferencias a través del diálogo, no habrá avances sustanciales mientras persistan las medidas unilaterales que afectan las exportaciones chinas, especialmente en sectores tecnológicos, industriales y agrícolas.
«China siempre ha abogado por una cooperación basada en el respeto mutuo y el beneficio compartido. Sin embargo, cualquier conversación debe darse en condiciones de igualdad y sin presiones arancelarias que distorsionen el comercio bilateral», según se explicó.
La postura china llega en medio de crecientes tensiones económicas, impulsadas por nuevas restricciones a la tecnología, medidas de control de inversiones y renovadas preocupaciones en torno a la seguridad nacional y la competencia industrial.
Desde la administración estadounidense no se ha confirmado aún una respuesta oficial, aunque sectores empresariales y financieros han instado a ambas potencias a reducir la incertidumbre que genera este prolongado enfrentamiento comercial.
Expertos coinciden en que el retiro gradual de los aranceles podría allanar el camino hacia una fase de estabilización económica global, en un contexto marcado por cadenas de suministro frágiles y presiones inflacionarias.