Ciudad de Panamá.- Expertos en comercio internacional han advertido que la escalada de aranceles entre potencias económicas está teniendo un impacto directo sobre el flujo del comercio marítimo mundial, generando inestabilidad en rutas clave y reduciendo la previsibilidad logística.
No obstante, Panamá podría encontrar oportunidades estratégicas para fortalecer su rol como hub logístico regional y global, en medio del escenario adverso.
Los analistas señalan que el endurecimiento de medidas comerciales entre Estados Unidos, China y otros países está llevando a reconfiguraciones en las cadenas de suministro, obligando a navieras y operadores logísticos a replantear sus rutas y puntos de conexión.
En ese contexto, la ubicación geográfica privilegiada de Panamá, sumada a la capacidad operativa del Canal de Panamá y de sus zonas francas, representa una ventaja competitiva.
“Panamá tiene la capacidad para convertirse en un actor aún más relevante en el comercio internacional si logra captar parte del volumen que está siendo desviado por las tensiones arancelarias”, afirmaron especialistas en logística regional.
También señalaron que el país debe apostar por mayores inversiones en infraestructura portuaria, eficiencia aduanera y digitalización para capitalizar esta coyuntura.
El Canal de Panamá ya ha registrado variaciones en los patrones de tránsito de buques, con ajustes tanto en origen como en destino de las cargas, lo que pone en evidencia la necesidad de flexibilidad operativa y análisis constante del entorno internacional.
Autoridades panameñas y organismos empresariales están evaluando medidas para atraer nuevos flujos comerciales y diversificar servicios logísticos, consolidando a Panamá como un centro neurálgico para la redistribución de mercancías en medio de una economía global cada vez más fragmentada.
Panamá podría salir fortalecida con guerra de aranceles
