San Juan. – La economía de Puerto Rico continúa mostrando señales de estabilidad con una proyección de crecimiento del 1.4% para el año fiscal 2025, según las últimas estimaciones publicadas por la Junta de Planificación de Puerto Rico.
El crecimiento, aunque moderado en comparación con el 2.8% registrado en 2024, está respaldado por el aumento en los desembolsos de fondos federales para la reconstrucción y mejoras en infraestructura, así como por una reducción en la tasa de inflación, que se espera cierre el año en 1.4%.
Fondos CDBG (Subvención en Bloque para el Desarrollo Comunitario): Se proyecta un desembolso de más de $2,054 millones, un incremento del 10.6% respecto al año anterior.
Proyectos de energía renovable: La inversión federal en sistemas solares y almacenamiento supera los $1,200 millones, con el objetivo de alcanzar el 40% de energía renovable en el sistema eléctrico para 2025.
Presupuesto gubernamental histórico: El gobierno propuso un presupuesto de $14 mil millones, enfocado en mejorar servicios públicos, apoyar a poblaciones vulnerables y fomentar el desarrollo económico.
Desafíos estructurales:
A pesar de las señales positivas, la economía puertorriqueña enfrenta retos significativos, entre ellos:
Altos costos de energía y agua, que impactan la competitividad empresarial y el consumo familiar.
Deuda pública elevada, especialmente en la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), cuya reestructuración aún se encuentra en proceso.
Aumento de quiebras comerciales: Se reportó un crecimiento del 23.5% en el número de bancarrotas durante los primeros cinco meses de 2024.
Sectores estratégicos: Industria farmacéutica y manufactura avanzada: Continúan siendo pilares del PIB local.
Aeroespacial y biotecnología: Ganan terreno como sectores emergentes con potencial de expansión en empleo e innovación.
La Junta de Planificación prevé un escenario económico favorable si se mantienen los flujos federales, se estabilizan los servicios básicos y se continúan promoviendo políticas de desarrollo sustentable.
De mantenerse las condiciones actuales, Puerto Rico podría consolidar su recuperación económica en los próximos dos años.