Hamburgo/Copenhague. – Las principales navieras globales Hapag-Lloyd y Maersk han anunciado reducciones temporales en sus operaciones en el Puerto de Haifa, Israel, en respuesta al aumento de tensiones geopolíticas en Oriente Medio, específicamente el conflicto entre Israel e Irán.
La compañía alemana Hapag-Lloyd confirmó una disminución temporal en la frecuencia de sus servicios hacia Haifa.
“Ante la creciente tensión geopolítica en Oriente Medio, seguimos de cerca la situación. Nuestras principales prioridades son la seguridad de nuestras tripulaciones y carga, así como la fiabilidad constante de nuestro servicio”, indicó la empresa en un comunicado oficial.
Según detalló, el servicio Atlantic Loop 7 (AL7) continuará operando en Haifa, mientras que el servicio East Med Shuttle 3 (EM3) ha suspendido temporalmente la aceptación de carga con destino a ese puerto.
La naviera informó que monitorea constantemente la situación junto a autoridades y operadores portuarios, y que cualquier cambio en las rutas, tiempos de tránsito o procedimientos será notificado de inmediato a través de su sitio web oficial.
Maersk también suspende escala en Haifa
Por su parte, la naviera danesa Maersk confirmó la suspensión total de las escalas de sus buques en el Puerto de Haifa, así como la aceptación de carga con destino al mismo, citando preocupaciones similares.
“Luego de analizar cuidadosamente los informes de riesgos de amenazas, en particular los riesgos potenciales de llegar a puertos israelíes específicos y sus implicaciones para la seguridad de nuestras tripulaciones, hemos tomado la decisión de suspender temporalmente las escalas en el Puerto de Haifa”, comunicó la empresa.
Impacto en la cadena logística regional
Estas decisiones reflejan el impacto que la situación geopolítica actual tiene sobre el comercio marítimo internacional y podrían generar ajustes logísticos para importadores y exportadores que dependen de este importante terminal portuario en el Mediterráneo oriental.
Ambas compañías reiteraron su compromiso con la seguridad y transparencia operativa, manteniéndose en contacto con clientes y autoridades portuarias para garantizar una gestión proactiva de los riesgos actuales.


