San José. — Con una superficie terrestre de 51,030 km² y una vasta extensión marina de 572,877 km², Costa Rica reafirma su carácter de país marítimo, orientado al desarrollo sostenible de sus recursos costeros y oceánicos.
El territorio nacional cuenta con seis puertos marítimos —tres en la costa del Caribe y tres en la del Pacífico— que constituyen nodos clave para el comercio exterior, la pesca, el transporte y el turismo náutico.
Estas infraestructuras portuarias son esenciales para la economía del país y están bajo supervisión técnica y normativa de la Dirección de Navegación y Seguridad, junto con otras autoridades marítimas competentes.
La zona marítimo-terrestre, definida como la franja de tierra de 200 metros contigua al litoral, está regulada por la Ley sobre la Zona Marítimo Terrestre (Ley No. 6043).
Esta normativa establece lineamientos para el uso sostenible de este territorio, promoviendo la conservación ambiental, el respeto a comunidades costeras y el ordenamiento territorial.
Costa Rica también impulsa políticas para fortalecer la gobernanza marina, proteger la biodiversidad oceánica y avanzar hacia una economía azul que armonice el desarrollo económico con la protección de los ecosistemas marinos.
“La vocación marítima de Costa Rica no es solo geográfica: es un compromiso con el uso responsable y sostenible de nuestros océanos, desde los puertos hasta la conservación marina”, afirmó el Ministro de Obras Públicas y Transportes.
El país continúa trabajando en alianzas internacionales, inversiones portuarias estratégicas y reformas legislativas que fortalezcan su rol como líder regional en política oceánica y desarrollo marítimo sostenible.
Costa Rica fortalece su identidad como nación marítima
